jueves, 24 de febrero de 2011

DESEMPLEO: Los informes internos de Bruselas detectan el doble de paro juvenil

FUENTE: EXPANSIÓN

La Comisión señala que ya en noviembre el desempleo entre los menores de 25 años afectaba a “más de 900.000”. Según Trabajo, que utiliza una metodología diferente, eran 461.400.


La invitación de la canciller Merkel para que los parados españoles emigren a Alemania no podía ser más oportuna. Durante el último año, el FMI, la OIT o la propia Comisión Europea han alertado de que el desempleo juvenil duplica al de la media comunitaria, un drama social que se ha convertido en el centro de las preocupaciones de Bruselas. No en vano, este colectivo ronda ya el millón de personas, según los informes internos que maneja el organismo.

En el último boletín laboral elaborado con información extraoficial –esto es, con datos alternativos de los que periódicamente envía cada socio–, la Comisión se hace eco de que España contaba ya en noviembre con “más de 900.000 personas jóvenes sin trabajo”, lo que representa una tasa de desempleo del 43,6%, 4,6 puntos más que hace un año y 14,3 puntos por encima de la registrada hace dos. “El mercado laboral español ha sido el que más ha sufrido durante la crisis y seguirá manteniéndose débil en 2011”, alerta.

Para ese mismo mes, los Servicios Públicos de Empleo arrojaron un volumen de parados menores de 25 de 461.409 personas, una brecha que vuelve a avivar la polémica de por qué el rastreo nacional del paro acostumbra a diferir del que realiza la UE.

Las diferencias también salen a la luz con la Encuesta de Población Activa, aunque la comparación en este caso no es del todo rigurosa, ya que la estadística del INE tiene en cuenta todo el último trimestre de 2010, no sólo el mes de noviembre. Con todo, el resultado de la medición del desempleo en ese tiempo se queda por debajo de lo que dice Bruselas. Concretamente, en los 840.600.

El Gobierno siempre se ha escudado en que la UE utiliza una metodología diferente. En efecto, el antiguo Inem realiza un seguimiento muy simplificado del paro. Principalmente, porque se trata de una foto fija que sólo tiene en cuenta a aquellas personas que se apuntan de facto en las listas.

Al respecto, los expertos recuerdan que quien no opta a cobrar el paro –es el caso los trabajadores con contrato temporal– se abstienen de acudir a la oficina de empleo. También pesa el efecto desánimo: la falta de expectativas de encontrar un trabajo por esta vía desalienta a otros a inscribirse en el Inem.

Otro factor esencial, y que no ha logrado hacer mella en la estadística europea pero sí en la española, es el efecto maquillaje lanzado durante la etapa de Jesús Caldera, que abrió la puerta a que las comunidades pudieran sacar de las listas a los desempleados en cursos de formación, una licencia que se remonta a una orden ministerial de 1985, pero que ahora los Servicios Públicos de Empleo practican con manga ancha. Por ejemplo: para sacar de la lista a un joven desempleado, la orden recoge que éste debe estar recibiendo “una beca de manutención” y demandar “un primer empleo”.

El porqué de la pesquisa
La gravedad de la crisis motivó a Bruselas a poner en marcha un termómetro estadístico alternativo para medir el grado de salud de empleo entre los socios (ver apoyo).

La inquietud de contar con fuentes de información extraoficiales no es baladí, particularmente en España donde la explotación estadística está monopolizada por organismos públicos. En Alemania, Reino Unido u Holanda, por ejemplo, la iniciativa privada ha adelantado al Estado como surtidor de empleo, de modo que existe un mayor control sobre las altas y las bajas de parados.

Respecto al futuro más próximo de la actividad española, la Comisión tumba indirectamente la tesis oficial sobre la posibilidad de que en el segundo empleo se logrará la creación de empleo neto. Este año y el próximo estarán marcados por un “débil crecimiento” (el PIB crecerá un 0,7% y un 1,7%, respectivamente) lo que invita a pensar que “España no se beneficiará de la recuperación europea”.

Eso sí, confía en que los contratos temporales (con un despido más barato) ayuden a descongestionar la abultada cifra de desempleo. A su juicio, la contratación eventual está dando síntomas de “fortalecimiento”. En el segundo y tercer trimestre, aumentó en 130.000 y 98.000 personas, respectivamente. También tiene esperanza en que la promoción para alentar la contratación a tiempo parcial dé resultados.

La UE hace de ‘Sherlock Holmes’ desde 2009
La Comisión Europea se ha lanzado a la caza de colaboradores que aporten “la máxima cantidad de información actualizada posible” para evaluar el grado de erosión de la crisis sobre el mercado laboral. Así lo comunicó por primera vez en la circular emitida por la Dirección comunitaria de Empleo en 2009, y de la que se hizo eco este periódico.

El objetivo, según explicaba la misiva, pasa por buscar las claves de la “extraordinaria situación económica” que azota a la UE y, en particular, a los socios más golpeados por el paro (“España, Irlanda y los Estados bálticos”). Desde entonces, la Comisión elabora mensualmente un boletín sobre empleo en el que tiene en cuenta información extraoficial.

Así, en su metodología enumera como fuentes de información: la Dirección General de Economía y Finanzas comunitaria; estadísticas nacionales y sectoriales de cada estado miembro; servicios públicos y privados de empleo (agencias) y artículos de prensa de medios reputados.

LA ESCALADA DEL CRUDO: El precio de la gasolina bate récords y desata la alarma en el Gobierno

FUENTE: LA VOZ DE GALICIA

Las revueltas sociales en Oriente Medio y el Magreb han disparado esta semana el precio de los carburantes hasta situarlos en récords históricos, por encima de los vividos en España durante la crisis del petróleo de julio del 2008. Llenar un depósito de 55 litros de gasolina sin plomo de 98 octanos puede salir hoy hasta once euros más caro que en enero. Y para hacer la misma operación usando gasoil hacen falta 10,3 euros más que a principios de año.
Los combustibles habían marcado en el inicio del 2011 precios similares, y en algunos casos ligeramente superiores a los de hace dos años y medio. Pero la tensión en Libia ha pulverizado las estadísticas. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, admitió ayer lo «alarmante» de la situación, durante una entrevista en la televisión pública. Y anunció que el Ejecutivo prepara medidas de emergencia, como el acopio de petróleo (ahora en España hay crudo para un máximo de 90 días) y planes de ahorro que podrían significar desde la reducción de los límites de velocidad, hasta la prohibición de circulación en algunas circunstancias, pasando por nuevas campañas de promoción del transporte público.
En Galicia, el litro de gasolina sin plomo se vendía ayer a 1,422 euros en varias estaciones de servicio ourensanas, donde se marcaron los máximos de la comunidad. En julio del 2008, el mismo combustible se pagó a 1,386 euros, un récord roto en enero y que ahora se queda pequeño. Con el diésel sucede lo mismo. A mediados del 2008 el litro marcó 1,329 euros. Y ayer se pagó a 1,336 en algunas gasolineras de Pontevedra; y hasta a 1,405 en Madrid (ver gráfico).
Los transportistas calificaron ayer la situación de «dramática», ya que el combustible supone un 50% de sus costes de negocio. Además, una escalada de precios de esta índole en plena crisis económica es doblemente preocupante. Primero porque la gasolina ya soportó un incremento del 13,3% en el 2010, mientras que el gasoil subió un 18,14%. Y después, porque los mercados comienzan a tener la certeza de que el problema no ha hecho sino comenzar.
Algunos economistas advierten del riesgo que una escalada así generaría en la economía nacional. La cadena maldita arranca con una traducción casi inmediata de la subida del petróleo en el precio de los carburantes. Estas alzas en los combustibles arrastran consigo el índice de precios de consumo (IPC). Y el encarecimiento de la vida podría congelar aún más el consumo de las familias, lo que a medio plazo acarrearía reducciones de la producción industrial. Precisamente, este descenso productivo y el estancamiento de la demanda interna es lo que ha provocado en España los efectos más perversos de la crisis: paro y cierre de empresas.
Además, el Banco Central Europeo ya ha dejado claro que si el IPC se dispara tendrá un efecto rebote en los tipos de interés.
Ayer, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, afirmó que España debe «reaccionar» ante la subida del petróleo y avanzó que, si esta se consolida, habrá que «reforzar los planes de ahorro energético» para que no impacte en la economía.
Recordó que la factura del petróleo aumentó 6.000 millones en el 2010, el equivalente a toda la inversión anual en I+D+i. Y también que en el 2008, cuando el barril superó los 145 dólares, se tomaron medidas sobre iluminación, velocidad máxima en las carreteras y promoción del transporte público, así como un uso más eficiente de la energía por parte de las empresas. El ministro negó que por ahora haya problema de suministro, ni de gas ni de petróleo, por la situación en Oriente, porque su origen «está muy diversificado y garantizado». «El problema es a qué precio -añadió-, y en eso tenemos que estar muy vigilantes».
Más uso del carbón
Además, aludió al posible uso del carbón para generar electricidad en las centrales térmicas. Por eso, apuntó, era tan importante el decreto que prima el consumo del carbón nacional. El titular de Industria explicó que, en cualquier caso, España dispone de reservas estratégicas de crudo para 90 días (30 en el caso del gas natural) para afrontar eventuales problemas de suministro derivados de la situación en el mundo árabe.
La cotización del crudo es una referencia para la gasolina o el gasoil. Pero no la única. Estos dependen, según señala la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), de los precios de la gasolina y el diésel en los mercados al por mayor de Mediterráneo y el noroeste europeo. Y también de los impuestos (que conforman el 50% de la tarifa final

Los salarios retroceden en 2010 mientras la productividad sube un 2%

FUENTE: EL PAÍS

Los datos de remuneraciones de 2010 se han convertido en la mejor defensa para los trabajadores -y la peor opción para los empresarios- del modelo salarial que propugna Alemania. La retribución por asalariado cayó en el último semestre del año (un 0,25%) por primera vez al menos desde 1996 (año con estadísticas comparables). Ese hito en las cuentas de la economía española convivió con importantes ganancias de productividad que alcanzaron el 2% en ese mismo periodo. Las cifras sitúan a España en el extremo opuesto al de los modelos que vinculan los salarios a la productividad.

El consumo privado está tomando el relevo al público tras los recortes
La remuneración de asalariados, disponible en la información sobre el producto interior bruto (PIB) que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), se ve muy afectada por la rebaja de sueldo aplicada a los funcionarios desde junio del año pasado. Es decir, obedece más a decisiones políticas que empresariales. En cualquier caso, las cifras demuestran que los sueldos evolucionan de espaldas a la productividad, aunque la medición que ofrece el INE de este concepto tampoco es óptima, pues refleja básicamente una destrucción de empleo muy superior a la del PIB. La canciller alemana, Angela Merkel, ha propuesto a los países que ligan sus salarios a la inflación -España entre ellos- que suplanten ese modelo por otro con mayor protagonismo de la productividad. De aplicar ese patrón, la moderación salarial que persigue se vería ahora truncada, pues los trabajadores saldrían ganando.

Los datos de contabilidad nacional ofrecen alguna pista de adónde han ido esas ganancias de productividad. Los beneficios empresariales, recogidos en el dato de excedente de explotación, avanzaron un 4% en el último trimestre de 2010 tras casi un año de caídas modestas. "Si los salarios siguen cayendo se frenará el consumo y se retrasará la recuperación", criticó ayer UGT en un comunicado.

Tomada en su conjunto, la remuneración de asalariados ha sufrido un duro retroceso durante los tres años de crisis. La parte del PIB destinada a sueldos resulta hoy equiparable a la de principios de 2007, en plena bonanza económica.

Más allá de estas cifras, la información del INE confirma que la contracción económica prácticamente tocó suelo en 2010, con una caída media del 0,1% interanual. Esa décima, en cualquier caso, mantiene a España en el grupo de cinco países europeos que aún no se libran de los descensos, cuando el grueso de Europa ya crece a un ritmo aceptable. La economía española nunca había encadenado dos años de contracción económica, como ha ocurrido en 2009 y 2010, al menos desde que el INE ofrece estadísticas.

La variación intertrimestral permite aventurar que el fin de la contracción está cerca. El PIB avanzó un modesto 0,2% en el último trimestre del año respecto al anterior, tras el estancamiento registrado en el periodo veraniego. Si se compara con el año anterior, la mejora es del 0,6%. Esa evolución dio pie al secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, para esperar "crecimiento sostenidos de actividad en todo 2011", aunque admitió que la recuperación es "aún débil".

A la mejora de las cifras ha contribuido más la expansión exterior de España que su contribución interna. Las exportaciones avanzaron un robusto 10,5% interanual en el último tramo del año. Frente a ese mayor peso del sector exterior, la demanda interna (consumo e inversión) sigue restando a la economía, aunque algo menos.

El consumo está experimentando un cambio de patrón en los últimos coletazos de la crisis. El gasto de los hogares, que se retrajo de forma más temprana, está ahora tomando el relevo al consumo público, muy afectado por las políticas de austeridad. Las familias comienzan ya a gastar más, mientras las Administraciones hacen lo contrario, lo que frena el avance conjunto del consumo, que permaneció estancado

Aprobada la ley Sinde con los votos de PSOE, PP y CiU

FUENTE: LA VOZ DE GALICIA

El pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer la conocida como ley Sinde, que facilita el cierre de páginas web que permiten la descarga de contenidos protegidos por derechos de autor. La norma fue aprobada por 323 votos a favor (PSOE, PP y CiU), 19 en contra (PNV, ERC, IU-ICV, BNG, CC, UPyD y Na-Bai) y una abstención.
El siguiente paso de esta norma será su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que se espera para esta semana. Después se procederá al desarrollo de su reglamento y a la constitución de la Comisión de Propiedad Intelectual, con lo cual las denuncias podrían comenzar a producirse en torno al próximo verano, según adelantó la ministra de Cultura Ángeles González-Sinde.
Esta disposición adicional en el texto de la Ley de Economía Sostenible prevé el bloqueo o cierre en un corto espacio de tiempo (de diez días como máximo) de sitios web que faciliten las descargas de material protegido por derechos de autor. Además, introduce la figura del juez que autoriza la identificación de los dueños del sitio denunciado, así como el cierre o bloqueo de este.
Toda petición de cierre o bloqueo tendrá que contar con una autorización judicial, que dispondrá 24 horas para aceptar o rechazar la denuncia. Si se acepta, las páginas están obligadas a identificar a quienes están detrás de la web. Ahí entra en juego la Comisión, que pedirá la retirada del contenido ilegal antes de 48 horas. Tras estos pasos, el cierre del sitio requiere de nuevo autorización judicial, en caso de no haber alcanzado un acuerdo entre las partes.
Pocas horas antes de la votación en el Congreso, grupos de activistas en la Red quemaban sus últimos cartuchos para evitar que las medidas antidescargas salieran adelante. Y como el 22 de mayo hay elecciones, la página web nolesvotes.com pide a los ciudadanos que no voten a aquellos partidos que han aprobado esta ley.